¿QUÉ ES LA DOBLE LIMPIEZA DEL ROSTRO?

La sabiduría popular asiática con sus bien llamados ‘rostros de porcelana’ nos regala uno de sus más preciados secretos: La doble limpieza. 

La técnica consiste en lavarte el rostro con un producto a base de aceite y otro a base de agua, tanto al inicio como al final del día. La idea es simple: no todos las impurezas tienen la misma consistencia y todo aquello que no logres limpiar en el primer paso, lo lograrás limpiar en el segundo. El proceso completo toma menos de 5 minutos y el resultado es tan asombroso que está causado furor dentro del mundo de la belleza.    

Pero, ¿Por qué es tan importante limpiar el rostro?

Antes de explicar paso a paso la aplicación de la doble limpieza, dejaré a un lado el glamour por un momento para hablarte de un tema 100% humano: Diariamente desechamos millones de partículas de piel muerta (¡ajjj!) que aunadas al polvo, contaminación del aire, sudor, y mil cosas más; se adhieren a la epidermis formando una capa que bloquea los poros y crea la plataforma perfecta para la generación de espinillas, puntos negros, pigmentaciones; y evitan la absorción de los nutrientes contenidos en tus cremas humectantes: ¡Hello arrugas y líneas de expresión! 

Así que como ves, la limpieza facial es crucial para el cuidado de la piel y su correcta aplicación te permitirá observar beneficios inmediatos.

La Doble Limpieza paso a paso

Paso #1: Regálate un masaje facial con un limpiador a base de aceite por 1 o 2 minutos. Remueve.

Nuestro equipo de Arum Namu seleccionó el Black Sugar Perfect Cleansing Oil  porque es super suave en cualquier tipo de piel, incluso las más sensibles. Además de estar formulado para que puedas removerlo con agua, lo cual el evita el exceso de fricción con el uso del algodón.

El aceite es el agente ideal para eliminar el exceso de grasa natural de la piel y es perfecto para limpiar impurezas como restos de protector solar, loción y maquillaje.

Paso #2: Lava tu cutis con un jabón limpiador a base de agua y hazte un masaje por espacio de 1 minuto.

Para garantizar la armonía entre ambos productos, es importante seleccionar una espuma indicada para tu tipo de piel. Los limpiadores a base de agua generalmente los puedes encontrar en forma de gel o espuma, y son perfectos para eliminar el polvo, las células muertas, bacterias y el sudor. Al terminar, seca tu rostro aplicando palmaditas suaves con una toalla facial. 

Tips

Tip 1: Si eres de la que utiliza bastante maquillaje de ojos, al finalizar los dos pasos utiliza un isopo para aplicar un desmaquillante solamente en las áreas en donde aún tengas rastros visibles. No hagas fuerza ni restriegues.

Tip 2: Ya que tu piel esté libre de impurezas es aconsejable aplicar un tónico facial para asegurarte que se encuentra completamente limpia y lista para absorber los nutrientes de tu crema humectante. 

Recuerda que tal como las caries suelen regocijarse en dientes mal lavados; los problemas dermatológicos proliferan en la piel descuidada; así que es hora que dejes de considerar la limpieza de la piel como una tarea tediosa, y le des el valor que se merece dentro de tu bienestar integral.